Miro a mi alrededor
y no me encuentro.
Me busco,
y no me siento.
Si me siento,
no me veo.
Si me veo,
no me oigo.
Si me oigo,
me busco.
Nada lógico,
ni acá, ni allá.
Estamos pero no
nos encontramos.
Cantamos y
bailamos para
sacar las penas.
Sentimos para amar.
Amamos el amor y
aveces el odio también.
Miramos con los ojos,
cuando tenemos la
posibilidad de mirar
con el oído o las manos.
No tiene sentido,
ni esto, ni eso,
ni... ni ni ni.
Nada por aquí,
nada por allá.
Hasta luego.
No hay comentarios:
Publicar un comentario